viernes, 23 de abril de 2010

Intranquilidad.

Para usted señor amo y maestro de la incertidumbre de la vida:

Y se esconde en tus cabellos,
En la perfecta innovación de sus tormentos,
En la forma precisa de definir a la brisa
Aun cuando esta estática y nos acalora la vida.

Un deseo profundo de abandonar este mundo,
Una nostalgia sincera que no la sufre cualquiera.
Un espejo de verdades refleja su piel que reclama libertades.

Esos caminos a la nada voluntaria, destinos inválidos
Carreteras perforadas, sueños desasistidos
Autonomía amenazada por una estrella que viene de pasada,
Y nos destituye.

Destituye el momento, el decir “ya pasó su tiempo”,
El “ya no vengas con cuentos añejos” y si deseas
Olvida nuestro encuentro paralelo.

Solo quedó disfrutar aquellos momentos que podía recordar
Cuando correteaba intranquilo asustado de si mismo
Buscando abrigo en aquellos cabellos marchitos
Que solo alquilaba para sentirse bien consigo mismo
Y mentía.


23-04-10

Porque Divagaba.

Porque nunca tuve demasiado tiempo,
Porque la realidad era demasiado obtusa y cruda,
Porque necesité inventarme muchos porqués.
Porque decidí dejarme llevar,
Porque la ventana se cerraba cada vez más
Impidiendo dejar el aire entrar
Y la mente comenzó a divagar.
Divagar a un círculo, cuadradamente construido.
Las salidas estaban bloqueadas, la realidad las arrinconaba,
La oscuridad me rodeaba mientras la presión aumentaba.
Las palpitaciones resonaban y yo simplemente divagaba.
No escuchaba nada, no miraba nada, y tocaba todo,
A ti, a él, a ella y los reconocía.
Nunca me abandonaron, la oscuridad que me rodeaba eran solo sus sombras acercándose.
Respiré e inventé un porqué.
Porque solo quise saber si aun podía respirar sola
Y solo había olvidado que ya no lo estaba porque me ahogué, mientras divagaba en su ausencia.

23-04-10

sábado, 10 de abril de 2010

Himmel-Olýmpos.

Una mirada al Olimpo
Esa honestidad que necesito
Sinceridad ahogada
Y la nostalgia difuminada.

Enséñame a amar
A mirar al Olimpo con ojos puros de verdad
Donde la luna ilumine las mañanas
Y el ocaso sea representado al amanecer.

Donde la vida nos enseñe como aprender a aprender
La insoportable necesidad de que la soledad sea solo
Una palabra sin aplicación comprobada.

Donde los abrazos sean el saludo de buenos días
Y las sonrisas no sean solo de Mona Lisa.

Irradio su paz interna
Aquella fuerza externa que derrumba barreras
Y aquí aprendo a aprender
Enseñándome a ser con la honestidad que necesito.
Mis razones estrelladas en una corazonada de ocaso infinito,
De luna memorizada, de sol eclipsado
Y viviendo para ser proyectada a crecer…disfrutando.

09-04-10